Los orígenes
Desde que se tienen noticias, la Alpujarra en general, y La Taha en particular ha atesorado un rico folklore musical, con dos vertientes muy claras. De un lado las coplas, el origen se pierde en las brumas del tiempo, ya que apenas contamos con documentación que lo atestigue, no obstante todos los investigadores que se han acercado al tema, citan la antigüedad de estas dos tradiciones. A todo ello se ha venido a sumar en los últimos años la dedicación de festivales especializados como Música en las Montañas.
El rico folklores musical de La Taha: las coplas populares, los bailes…
La Taha, enclavada en la Alpujarra ha mantenido una rica tradición oral de coplas y cantares populares. El aislamiento de sus poblaciones ha permitido mantener estas canciones hasta hoy.
Algunas de estas aportaciones, las podemos ver en sus vertientes de romances cantados individualmente o de un coro de mujeres mayores. Estas composiciones fueron protagonistas de los Encuentros de Tradición Oral de Granada, y de los que abajo os proponemos algunos ejemplos: un romance tradicional, una copla popular y una obra de nueva composición.
Durante el Festival de Música Tradiciona de la Alpujarra de 1998 se hizo un homenaje a varios músicos del municipio, de reconocido prestigio y que han dado impulso a la música. Copiamos estos contenidos (no actualizados) en gratitud a su labor musical durante toda una vida.
En el seno de unos pueblos muy aficionados a la música nacen Roque y Ramiro Álvarez Lemos, en 1930 y 1933 respectivamente. Su familia estaba intimamente ligada a la música. Así, su padre era segundo maestro de música, y su tío José, el Sabio, tocaba el acordeón y el laúd, en la banda de Pitres. Desde pequeños empiezan a tocar en los bailes, hasta que por fin tocan solos cobrando tres duros por baile, llegando a ir hasta Órgiva, Torvizón o Cádiar.
Ramiro Álvarez Lemos aprende música durante el servicio militar, incorporándose a una rondalla. Con los años va incorporando más instrumentos a su repertorio llegando a dominar la guitarra, la bandurria, el laúd y la mandolina. Ahora Ramiro dirige la Rondalla «Buenos Aires», la Rondalla infantil del AYuntamiento de Granada en la barriada de La Chana y organiza conciertos en Granada en centros benéficos, obras sociales y semanas culturales.
Roque Álvarez Lemos, después de aprender música de oído, siguió dedicándose a ella. En su trabajo que le obligaba a numerosos desplazamientos nunca olvidaba ir acompañado de un instrumento para amenizar las veladas. Pero nos ería hasta los 60 años, cuando se jubiló que pudo dedicarse por completo a la música. Entonces en su afán por aprender lo llevó a perfeccionarse más todavía estudiando musica oficialmente.
Roque guarda en casa un aveintena de instrumentos, porque sabe tocar el violín, la guitarra, el laúd, la bandurria, la mandolina, y el timple. En la actualidad toca en cuatro grupos diferentes, como son: varias rondallas, una tradicional, otra orientada más a tocar jotas, y los Auroros de Santa María, donde interpreta en misas, bodas, Auroras, etc. Su labor se acerca mucho a las obras benéfico-sociales porque atúan en Hospitales, Centros de Jubilados, Psiquiátricos, etc. Ultimamente ha compuesto varia sobras entre la que destaca la mazurca titulada «La Alpujarra», que se presenta en el Festival de la Alpujarra como primicia.
Continuador de ésta estirpe, es José Álvarez, hijo de Ramiro y sobrino de Roque, Nacido hace 41 años en el barrio Alto de Pitres. Allí escuchó los sones de guitarras y laúdes que circulaban por su casa. Hacia los 7 años su padre comenzó con él la enseñanza de la guitarra. Poco a poco fue acompañando a sus mayores en algunos bailes -seguramente los últimos que se hicieron-. y como autodidacta fue aprendiendo más y más música, dedicándose a la guitarra clásica. Actualmente alterna la enseñanza (profesor de E.G.B. en Canarias) con la música. Ha compuesto algunas obras como dos villancicos, corales, piezas para rondalla y la mazurca que se presenta en el Festival «A pie juntillo», hecha especialmente para este acto.
Los encuentros navideños de adultos
Durante la época navideña, las antiguas Escuelas de Adultos de la zona, hoy Servicios de Educación Permanentes, han trabajado conjuntamente para rescatar del olvido y evitar la pérdida del folklore musical navideño de la Alpujarra Alta.
Para ello, algunos años realizan un encuentro de coros, donde cada pueblo acude con un par de canciones, en lo que resulta ser un lugar de convivencia y de aprendizaje musical. El marco son las iglesias de la comarca. Algunas fotos de los encuentros de años pasados muestran esta tradición.
Las bandas de música
En La Taha, tanto en Pitres como en Mecina, hubo en el siglo pasado una tradición de bandas de música, compuesta por los lugareños que aprendían con un maestro a tocar un instrumento.
Estas bandas, eran muy apreciadas porque permitían dar cobertura musical a los eventos de la comarca, normalmente las fiestas populares y sobre todo las fiestas patronales.
En la fotografía podemos ver, una de las pocas imágenes que se conservan sobre la agrupación musical de Mecina.
Lamentablemente con el tiempo, la despoblación, la posguerra, etc. la Banda de Música de Mecina desapareció.
Como curiosidad, en el suplemento del diario ABC, llamado Blanco y Negro, del día 17 de agosto de 1913, ya aparece mencionada la Banda de Música de Pitres, acompañando a la Virgen de las Nieves, en la tradicional romería. Aunque en la fotografía sólo se aprecia la imagen de la misa, en el texto se habla del director de la época, Daniel Pérez, que también hacía composiciones originales.
Durante un tiempo, la banda de música de Pitres también desapareció por los mismos motivos: los efectos de la posguerra, la emigración, etc. hasta que en los años 80 a iniciativa de algunos antiguos músicos se constituyó de nuevo, con Francisco Nieves, como «maestro de música«, que dirigió la banda durante muchísimos años.
Se creó a la vez la Asociación Musical La Taha de Pitres, que ayudó a gestionar la Banda y sus necesidades. Hoy, la Asociación Musical de Pitres, con estatutos y fuerzas renovadas, dirigida por Miguel Ángel Nieves Pérez, sobrino del anterior maestro, sigue ofreciendo conciertos y actuaciones musicales para disfrute de todos.
El festival Música en las Montañas
Música en las Montañas es el nombre de un festival de conciertos de música que se celebra anualmente en el municipio de La Taha.
¿Cómo se realiza?
Los pueblos de La Taha apenas tienen escenarios adecuados para grandes conciertos por lo que la decisión de dónde realizar los conciertos era clara. Los monumentosde esta comarca son las pequeñas plazas de sus propios pueblos, y sus particulares eras. Las eras son espacios de tierra firme empedrados donde se trillaba el trigo para separar el grano de la paja, normalmente circulares, y en zonas de paso de aire, por lo que tienen unas magníficas vistas. Suelen estar a la salida de los pueblos, fuera del casco urbano, una razón más para disfrutar. Son lugares ideales para el reposo, la contemplación y por supuesto para el deleite de los sentidos.
Los conciertos al aire libre unen la música y la naturaleza quedando la música libre de los corsé impuestos por los auditorios clásicos, la rigidez de los convencionalismos y las normas sociales. En espacios abiertos la musica se convierte en una experiencia sensitiva distinta, colectiva y directa. Se unen así tres conceptos tan humanos como el patrimonio etnológico (la herencia de un pasado), la naturaleza en su máximo exponente (que debemos legar a nuestros sucesores), y articulando ambos, el arte de la música.
¿Quién organiza?
Precisamente esa ha sido una de las razones que trajo a la escuela internacional de música «Alexander Music School» hasta Ferreirola. Su director Cat Jary (d.e.p.) enamorada del lugar decidió comprar una casa en un espacio que reconfortaba el espíritu. La Escuela de Música basada en la técnica Alexander atiende a todos los músicos que han sufrido algún bloqueo en su carrera, sea por motivos físicos, psicológicos o de motivación.Ubicar la escuela en un lugar donde la naturaleza está onmipresente ayuda a conseguir esos objetivos.
Con una cantidad importante de músicos acudiendo a Ferreirola, y un paisaje embriagador, era fácil que surgiera un festival como el de Música en las Montañas. La Escuela de Músicacon el patrocinio del Ayuntamiento de La Taha idearon la posibilidad de ofrecer conciertos al aire libre utilizando las plazas y eras del pueblo como el mejor escenario posible.
¿Cuándo se celebra?
Es por tanto un festival completamente distinto a los que existen en otras zonas. Tiene lugar durante todo el año, pero sus meses de mayor intensidad coinciden con los que el clima es más generoso: primavera y verano. El resto del año los conciertos tienen lugar en pequeños salones de actos, y en los otros monumentos del municipio: las iglesias y ermitas.
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